PALABRA POR PALABRA. La vida como negocio
No
sé yo si en otros países democráticos pasa lo mismo que aquí, por desgracia no
estoy tan viajado como algunos de nuestros senadores y diputados. Pero el caso
es que mientras Cataluña se busca a sí misma en los espejos del callejón del
Gato del gobierno de Mas, el otro gobierno, el de Rajoy, parece haber roto
todos los espejos de Moncloa para no tener que mirarse a la cara (dura) cada
buena mañana. Deformar la realidad hasta el esperpento u ocultarla e ignorarla
deliberadamente; mentir a lo bestia, sin remilgos, decir que lo blanco es
negro, que los otros son más corruptos que ellos, que Pablo Iglesias es la niña
del exorcista (poseída por Chávez, claro) y que no deja de vomitar populismo
(el palabro de moda de los Populares…). ¡Si Podemos gana las elecciones todo se
vendrá abajo!, nos repiten como un mantra quienes no han parado hasta dejarnos
a todos en pelota. Esta es toda la enjundia del debate político que nos sirven
a diario radios y televisiones. Nos han anestesiado con la vaciedad de
sus discursos políticos, con ese lúbrico
sentimentalismo nacional de unos y otros, y, mientras tanto, asistimos incrédulos
al saqueo de nuestros servicios públicos con el pretexto paradójico de,
precisamente, salvar nuestros servicios públicos.
Acaba
de publicarse un libro, titulado La salud
como negocio (Laiovento), en el que han participado diversos profesionales
de la sanidad bajo la coordinación del médico y escritor Pablo Vaamonde, donde,
con los datos por delante, se hace una reflexiva y minuciosa denuncia “de lo
que están haciendo nuestros gobernantes con la sanidad: ejecutan un implacable
desmantelamiento del sistema público para generar espacios de negocio”. El
Catedrático de Políticas Públicas y experto en economía política, Vicenç
Navarro, considera que “Este libro es uno de los mejores documentos que se han
publicado en España sobre lo que está ocurriendo en la sanidad pública. Es una
mina de información. Escrito de una manera amena, fácil de leer y comprender,
conjuga pasión y compromiso por la justicia social con un gran rigor y
credibilidad en su documentación”.
Me parece
que esta obra es un buen estímulo para empezar a despertar, para salir de ese
estado de narcolepsia política que padecemos. Es un libro para los ciudadanos,
un arma de lucidez y veracidad contra los que quieren hacer de nuestra vida su
negocio.
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